28 de octubre de 2006

El regalo menos imaginable


No fue una postal como la que le llegó el señor Ennis del Mar, pero los sentimientos provocados son los mismos. He recibido una llamada telefónica de él, que se ha convertido en el mejor regalo que jamás me hubiera imaginado. Con un día de anticipación, la única persona a la que he amado en términos de relación de pareja, habló para felicitarme por mi cumpleaños.
Estoy feliz, con la sonrisa y alegría casi imperceptible con la que Ennis lee y relee la postal que le envía Jack.

4 comentarios:

pon dijo...

Me alegro mucho hombre.

Alas dijo...

¡Qué buen inicio de cumpleaños!, FELICIDADES, FELICIDADES, FELICIDADES!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Ole, ole y ole... como decimos por aquí.

Muchas felicidades querido compañero.

Anónimo dijo...

Felicitaciones, y me alegro un montón, pero mucho, mucho.